I'll never put no one above ya

No me gusta quedar en segundo lugar. Ni cuando juego a algo ni en la vida real. Simplemente, no.
Osea, si te pongo en primer lugar lo único que espero de vos es que hagas lo mismo. Es mucho pedir¿?
Yo entiendo que no soy la persona mas confiable del mundo. Que muchas veces rompo mis promesas. Pero si hay algo bueno que sé que puedo destacar de mi es la lealtad que tengo hacia mis amigos. Y aunque me haga sentir una novia celosa, no me parece que esté fuera de lugar exigir lo mismo que doy. Porque es una mentira que uno tiene que dar y no esperar nada a cambio. Si uno da, da y da, llega un momento en que tenés las pelotas del tamaño de dos globos aerostáticos y lo único que querés hacer es mandar todo a la mierda. Y no tengo ganas de que me pase lo mismo dos veces, quiero creer que aprendo de mis errores, y si la última vez me callé la boca y esperé a que la otra persona se diera cuenta y hasta lllegué a ignorarla, esta vez no voy a hacer lo mismo. Pero parece que cuando te lo digo te reís y te lo pasas por la raya del orto, y eso me hace sentir más mierda. Yo juro que estoy tratando de no hacer lo mismo dos veces porque perder un amigo es algo muy doloroso, por lo menos para mí. Pero me dan cada vez más ganas de ignorarte y que te vayas a la reconcha de tu tía. Una cosa es que nos dejes de lado, otra muy distinta es que nos tomes por pelotudos. Sí, nos damos cuenta, no somos unos idiotas.